Provincias españolas
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Escamilla es un municipio situado en la provincia de Guadalajara, Castilla-La Mancha, España. Situado a una altitud de 1.023 metros, el municipio tiene 39,21 km2 y limita al norte con Peralveche, al este con Salmerón y la provincia de Cuenca, al oeste con Pareja y al sur con Millana. El punto más destacado del término es el Villar, con 1.102 metros, situado a poco más de 2 kilómetros al norte del pueblo, mientras que el punto más bajo se encuentra al sur, a unos 800 metros.
Ciudad autónoma españa barcelona
Guadalajara (/ˌɡwɑːdələˈhɑːrə/, español: [ɡwaðalaˈxaɾa] (escuchar))[2] es una ciudad y municipio de España, situada en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha. Es la capital de la provincia de Guadalajara.
Situada en la parte central de la Península Ibérica, a unos 685 metros sobre el nivel del mar, la ciudad se extiende a lo largo del río Henares. En 2018 [actualización] tiene una población de 86.222 habitantes, lo que la convierte en el segundo municipio más poblado de la región.
Se sabe que en esa región se encontraba una ciudad romana llamada Arriaca, posiblemente fundada por una cultura prerromana. Sin embargo, no hay pruebas arqueológicas de su existencia, sólo referencias en textos como la Ruta Antonina, que la describen como en manos de los carpetanos[3] cuando la encontraron los romanos. La ciudad, como Caracca,[4] fue incorporada a la provincia romana de Hispania Tarraconensis. La ciudad se encontraba en la carretera de Emerita (actual Mérida) a Caesaraugusta (actual Zaragoza), a 22 M. P. al noreste de Complutum (actual Alcalá de Henares).
Guerra civil española guadalajara
Guadalajara (/ˌɡwɑːdələˈhɑːrə/, español: [ɡwaðalaˈxaɾa] (escuchar))[1] es una ciudad española de Castilla-La Mancha, capital de la provincia de Guadalajara. Situada a unos 60 kilómetros (37 millas) al noreste de Madrid, la ciudad se encuentra a caballo del río Henares. En 2018 tiene una población de 86.222 habitantes, lo que la convierte en el segundo municipio más poblado de la región.
Se sabe que en esa región se encontraba una ciudad romana llamada Arriaca, posiblemente fundada por una cultura prerromana. Sin embargo, no hay pruebas arqueológicas de su existencia, sólo referencias en textos como la Ruta Antonina, que la describen como en manos de los carpetanos[2] cuando la encontraron los romanos. La ciudad, como Caracca,[3] fue incorporada a la provincia romana de Hispania Tarraconensis. La ciudad se encontraba en la carretera de Emerita (actual Mérida) a Caesaraugusta (actual Zaragoza), a 22 M. P. al noreste de Complutum (actual Alcalá de Henares).
La historia de la ciudad durante el periodo de Al-Andalus fue importante. Se construyeron monumentos como el puente árabe sobre el río Henares, el antiguo Alcázar (palacio en árabe), hoy en ruinas, y una mezquita que luego se convirtió en la antigua catedral de Santa María.
León España
El municipio de Guadalajara (86.222 habitantes en 2016, por tanto, el segundo más poblado de Castilla-La Mancha después de Albacete; 23.551 ha; sitio web municipal) está situado a 60 km al noreste de Madrid.
Guadalajara fue establecida por los moros a finales del siglo VIII-principios del IX, como una fortaleza que vigilaba la frontera con los estados cristianos. Wad-al-Hayara significa Valle de los Castillos o Valle de las Piedras; el nombre del asentamiento romano, Arriaca, que se encontraba en la zona, podría tener el mismo significado.
Poco se sabe del periodo musulmán en Guadalajara; situada en un territorio disputado, la ciudad experimentó un desarrollo limitado, excepto en el siglo X. De esta época se conservan el puente sobre el río Henares, las ruinas de la alcazaba y la calzada que comunicaba el río con el casco antiguo.
Guadalajara decayó en el siglo XVII, después de que los Mendoza trasladaran su corte a Madrid. Arruinada y despoblada, Guadalajara se acercó a la supresión. Esto se agravó con el saqueo de la ciudad durante la Guerra de Sucesión. Felipe V evitó la ruina total de la ciudad estableciendo una Real Fábrica de Paños, por lo que la población aumentó a principios del siglo XIX. El desarrollo de la ciudad se detuvo de nuevo, tras la Guerra de la Independencia (1808-1813) y el cierre de la Real Fábrica (1822). Guadalajara sobrevivió como capital de provincia y sede de administraciones públicas, como la Academia de Ingenieros Militares, creada en 1840.