¿Se puede renunciar a una parte de la herencia?
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La herencia de una persona se transmite cuando ésta fallece, o cuando es imposible saber, debido a una ausencia prolongada, si está viva o muerta. Al iniciarse el procedimiento sucesorio, todos los bienes del fallecido pasan a sus herederos. Sin embargo, los herederos no están necesariamente obligados a aceptar la herencia.
Esta opción es para los herederos indecisos, que no están seguros de si deben aceptar o renunciar a la herencia. En efecto, es posible que la deuda asociada a una herencia sea superior a los bienes, en cuyo caso es evidente que al heredero le conviene no aceptar la herencia, o correr el riesgo de tener que liquidar personalmente las deudas pendientes del difunto.
También puede ocurrir que el heredero no disponga aún de todos los elementos necesarios que le permitan tomar una decisión con conocimiento de causa (por ejemplo, la contabilidad del fallecido para evaluar los bienes y las deudas vinculadas a la herencia).
El plazo para ejercer este derecho es de 3 meses más 40 días a partir del día del fallecimiento del difunto (3 meses para elaborar el inventario y 40 días para que el heredero reflexione sobre su contenido).
Renuncia a la herencia después de 9 meses
Antes de aceptar una herencia, los herederos tienen que considerar si deben aceptarla o no. Si temen que el patrimonio del fallecido contenga más deudas, tienen que considerar si aceptan la herencia a beneficio de inventario. Los herederos pueden optar por aceptar la herencia con el procedimiento de beneficio de inventario para evitar ser considerados responsables de las deudas del difunto. Si no se toman las precauciones oportunas, los herederos podrían acabar respondiendo de las deudas dejadas por el causante.
La responsabilidad penal recae en el fallecido. Ningún heredero o pariente puede ser acusado de delitos penales supuestamente cometidos por el fallecido. Asimismo, ningún heredero o pariente puede ser castigado por delitos por los que el fallecido haya sido condenado.
Una vez que un heredero acepta una herencia, no puede renunciar a ella. La aceptación es irrevocable aunque el heredero descubra que la herencia contiene más deudas que patrimonio y que tendrá que hacer frente a esas deudas.
Los herederos que aceptan una herencia pueden solicitar al tribunal que anule la aceptación de la misma si resulta que fueron coaccionados para aceptar la herencia o fueron defraudados para hacerlo por otros. Aunque esto implicaría un procedimiento judicial que suele ser complicado, si tiene éxito, el resultado puede ser beneficioso para los que fueron defraudados o coaccionados para aceptar la herencia.
Modelo de carta de renuncia a la herencia
Desde el blog de AYCE LABORYTAX despejamos tus dudas, dándote toda la información para que sepas todo lo necesario para asumir el papel de heredero,así como los diferentes momentos en los que poder renunciar a una herencia.
El impuesto de transmisiones patrimoniales es un impuesto estatal que grava a las comunidades autónomas, por lo que las obligaciones fiscales del contribuyente dependerán del grado de parentesco que tenga con el fallecido.
A continuación se detallan las fórmulas disponibles a partir de ese momento. No obstante, hay que tener en cuenta que la renuncia más sencilla a la herencia es la “repudiación”, y que no implica un favorecimiento a un tercero por parte del heredero.
De este modo, la situación cambia si se produce una renuncia a la herencia favoreciendo a terceros, ya que será como si el heredero inicial hubiera dispuesto de dichos bienes. Esta cesión de derechos será, ante la Agencia Tributaria, una donación, por lo que tributará como tal.
Hay que tener en cuenta que, para que la renuncia a la herencia sea efectiva, deberá hacerse de forma expresa y pública ante notario, o por vía judicial mediante escritura, sin que en ningún caso se admitan renuncias parciales.
Renunciar a la herencia para evitar a los acreedores
Si se niega a aceptar una herencia, no será responsable de los impuestos de sucesión, pero no podrá decidir quién recibe los bienes en su lugar. El legado pasa al beneficiario contingente que figura en el testamento o, si esa persona murió sin testamento, según las leyes de sucesión intestada de su estado.
De acuerdo con las normas del Servicio de Impuestos Internos (IRS), para rechazar una herencia, debe ejecutar una renuncia por escrito que exprese claramente su intención “irrevocable y sin reservas” de rechazar el legado. Esta renuncia debe ser firmada, notariada y presentada ante el tribunal testamentario y/o el albacea de la última voluntad y testamento de manera oportuna. El plazo del IRS es dentro de los nueve meses siguientes al fallecimiento del difunto o, si el beneficiario que renuncia es menor de edad, después de cumplir los 21 años.
Si ya ha aceptado la herencia o alguno de sus beneficios, es probable que Hacienda considere inválida la renuncia. Además, la negativa debe dar lugar a que los intereses pasen “sin ninguna discreción por parte de la persona que hace la renuncia” al cónyuge del difunto o a cualquier otra persona que no sea la que hace la renuncia.